Día 5 Sighișoara - Brasov

Dejamos Sighișoara, lo recomiendo si venís a Rumania, tiene mucho encanto, los cuervos se despiden de nosotros, aunque yo diría que son vampirillos. 

 Tenemos poco camino hasta Brasov. De Paso paramos en Viscri, una pequeña y antigua aldea fundada por Alemanes. Resulta que en aquellos tiempos pasados el que fuera rey de Rumania ofrecía a esta gente ocupar territorios ya que los tenían libres y sin vida.

Llama la atención que el pueblo no tiene ninguna calle asfaltada, hay animales sueltos por todo y en su parte central una conducción de agua tanto para humanos como para animales en troncos de árbol.

Pero bueno, hemos parado aquí porque hay una iglesia fortificada, si que eran religiosos pero el uso que le daban era el de protegerse si la aldea era atacada, muy habitual por los otomanos en aquellos años.

En estos momentos la iglesia la cuidan unos gatos, muy Alemán.

Abandonamos este precioso poblado y después de rellenar nuestros intestinos llegamos a Brasov. Nos habían dicho que su mercado de Navidad era el más grande de Rumania. Pues si, es cierto. Más que el mercado yo diría que es todo su centro histórico,  calles inacabables de comercios y de pubs,  muy entretenido. Aquí si que saben emplear la iluminación como decoración. 

Ya después de la cena volvemos al hotel, que más que hotel era un antro.  Pero una cosa si que tenia que en el baño podías hacer aguas menores y mayores mientras te duchas 😂. Y si solo querías ducharte tenías que saltar el WC. 

Ale a descansar, mañana toca el último día en el que visitaremos un monumento histórico Rumano...